Brooke Lemon siempre ha llevado la vida que quería, con sus aventuras salvajes y sus errores, algo que Mindy, su hermana perfecta, nunca ha entendido. De modo que, cuando Mindy se presenta en su casa en pleno ataque de nervios con sus tres hijos a cuestas, Brooke se queda de piedra.
En su deseo de reconciliarse, accede a llevarse a los niños de vuelta a Wildstone para que Mindy pueda calmarse y recomponer su vida. Lo que Brooke no quiere admitir es que ella está igual de perdida... Porque ¿cómo regresar a tu pueblo después de siete años lejos de allí? Brooke no tarda en encontrarse cara a cara con un error de su pasado: un hombre alto, moreno y sexy. Pero Garrett ya no está interesado en ella. Aunque sus actos no son coherentes con sus palabras, lo que hace que Brooke empiece a sentir cosas que creía olvidadas.
Ambas hermanas no tardan en comenzar a preguntarse si se habrán equivocado en la vida y en el amor. Solo saben que no consiguen dejar atrás sus fantasmas. Y, cuando salgan a la luz los secretos, aprenderán que, a veces, la persona que más puede ayudarte es aquella a la que no se te había ocurrido pedir ayuda.